Hoy no tengo nada que quiero escribir. Estuve pensando en algo que me enseñó Ariel esta mañana que decía:
“…hablamos en exceso, con demasiada ligereza, volvemos público lo que es privado, convertimos en clichés de falsa certeza lo que era provisional, interino, y por consiguiente vivo en el hemisferio oscuro de la palabra… En el chorro abundante de la producción actual, ¿cuándo se convierten las palabras en palabra? ¿Y dónde está el silencio necesario para escuchar esa metamorfosis?”Hoy es mi día para hacer silencio y esperar que mis palabras se conviertan en palabra. Por eso les dejo con un poema de Ángel González un poeta que disfrutamos y creo que hoy expresa muy bien lo que siento, tal vez ese “porvenir” son las ideas o inspiración que busco pero no encuentro.
Porvenir
Te llaman porvenir
porque no vienes nunca.
Te llaman: porvenir,
y esperan que tú llegues
como un animal manso
a comer en su mano.
Pero tú permaneces
más allá de las horas,
agazapado no se sabe dónde.
¡Mañana! Y mañana será otro día tranquilo
un día como hoy, jueves o martes,
cualquier cosa y no eso
que esperamos aún, todavía, siempre.
Ángel González
Sólo ante el silencio, la nota musical adquiere sentido. Asimismo, La Palabra.
ResponderEliminarSaludos.