lunes, septiembre 6

Los libros son mi hogar.

Los libros no se han hecho para servir de adorno: sin embargo, nada hay que embellezca tanto como ellos en el interior del hogar.Harriet Beecher Stowe


Las mudanzas no son mi pasatiempo favorito. De niño recuerdo las pocas veces que nos mudamos. Lo único emocionante era pegar gritos en la habitación recién vaciada y escuchar como el eco repetía todo. Aparte de eso todo era guardar, limpiar y después desempacar; tedioso.

El último mes me ha tocado, por diversas razones, mudarme unas tres veces. Eso de empacar, guardar y limpiar sigue siendo igual de tedioso, lamentablemente eso de pegar gritos y escuchar el eco en la habitación vacía ha perdido mucha gracia, tanta que ya ni siquiera lo intento (pensándolo bien quizá sea yo el que ha perdido gracia).

Como sea, las constantes mudanzas han tenido sus dosis de aventura y la emoción de estar empezando una vida diferente. Sin embargo lo más emocionante ha sido el abrir cajas y cajas llenas de libros. Empezar a ordenarlos, pensar donde irían y que orden seguirían, encontrar libros que leí hace un buen tiempo y comentarle algo a Hannah al respecto, encontrar libros que aun no he leído, pasar sus páginas de prisa e imaginar las de cosas que tienen por contarme, las de cosas que vamos a vivir juntos.

La casa empieza tomar forma, aun hay libros amontonados por todos lados pero eso solo me hace sonreír. No puedo concebir una mejor manera de empezar mi vida con Hannah que rodeados de libros leídos y por leer. No puedo imaginar un mejor lugar para llamar hogar que una casa llena de libros.

2 comentarios:

  1. Cuando voy a una casa ajena, me siento muy bien cuando veo libros! No se porque me pasa. Y si entro en confianza, algun dia los pido prestados!

    ResponderEliminar
  2. Estoy por mudarme, y me hiciste sentir algo bueno en la mudanza ¡¡

    ResponderEliminar