Por Ricardo J. Flores (Previamente publicado en el blog LatAm Development)
Si una sociedad quiere llevar un nivel de vida más allá de sus posibilidades económicas reales, tarde o temprano sufrirá las consecuencias de dicha decisión. Poco importa si la decisión de tratar de llevar un nivel de vida empleando estúpidamente recursos económicos escasos, se tomó bajo argumentos de “solidaridad social” o para “evitar que el país se incendie”. De buenas intenciones está pavimentado el camino al infierno.
Tampoco importa si la sociedad es o se cree rica o pobre, igualmente sufrirá las consecuencias de sus decisiones económicas pobres basadas en argumentos necios, es decir sin sabiduría, inteligencia ni comprensión de la realidad y además, sin ponderar realmente las consecuencias futuras de las mismas.
Mucho menos importa, aunque muchos no lo crean, que se confiese una ideología de derecha o de izquierda, ni siquiera de centro. Esto parecen no entenderlo la gran mayoría de los líderes sobre los cuales recae la responsabilidad de tomar o influir las decisiones sobre el uso de recursos escasos sin base ni racionalidad económica.
Los de la izquierda, o los llamados del socialismo del siglo XXI, creen que este es un pensamiento falso, o como me dijo en el año 2000 un alto funcionario del gobierno del presidente Hugo Chávez, es un “constructo” (sic) de la ideología capitalista. Porque en su opinión la escasez sólo existe en la mente de los que “inventaron” las leyes de la economía. Supongo que con lo de “constructo” se refería a una invención. Por eso las decisiones en materia económica de los gobiernos de izquierda dan mayor importancia dizque a lo “social” y desdeñan las consecuencias propiamente económicas, que poco les importan.
Por otra parte, los de la derecha, donde quiera que se encuentren, se creen inmunes a la acción de las leyes de la economía sólo por el hecho de que en sus discursos, con los que apoyan sus malas políticas, se llenan la boca con las palabras dizque a favor del libre mercado y la competencia. Pero sus acciones y decisiones no toman en cuenta para nada las consecuencias que para una sociedad libre tiene tratar de “pasarle por encima” a las leyes más elementales de la economía. Desgraciadamente, cometen el mismo error que los de la izquierda.
De hecho, y tal como está sucediendo en los Estados Unidos, aquí en El Salvador y en muchos otros pueblos del mundo, nada hay más letal para el futuro de la libertad que las consecuencias de las malas decisiones económicas del pasado, junto con las muy malas medidas que se aplican en el presente.
Las consecuencias son que las sociedades terminan volcando su desilusión y amargura por los resultados de sus decisiones económicas erradas, en las promesas fútiles del intervencionismo económico y social, de la socialización y la estatización. Y lo más escalofriante: que las medidas de socialización y mayor intervención de la economía, las terminan tomando precisamente aquellos que dicen ser los paladines de la libertad.
Como siempre, aparecerán los iluminados que explican las crisis actuales con argumentos falaces que evitan o niegan en esencia que atropellar las leyes de la economía tiene consecuencias. Una de las cuales es que lo que hoy se gasta sin control en actividades de poca o ninguna producción real y sólo en el consumo, repercute en las posibilidades de crecimiento futuro. Porque los recursos económicos disipados en el presente no tienen ningún efecto positivo sobre la expansión de las posibilidades futuras de la sociedad, sino por el contrario el de condenarla aun más a las pesadas cadenas de la pobreza y ausencia de libertades.
Este es el precio que pagaremos por incurrir neciamente en el error de obviar las leyes fundamentales de la economía. Como diría el adagio de origen inglés: “no puedes comerte tu pastel y seguir teniéndolo” (can’t eat one’s cake and have it too).
Ricardo J. Flores, nuestro invitado especial tiene un MA en International Development Policy de Duke University y actualmente reside en El Salvador. Pueden leer este articulo en su blog.
Si una sociedad quiere llevar un nivel de vida más allá de sus posibilidades económicas reales, tarde o temprano sufrirá las consecuencias de dicha decisión. Poco importa si la decisión de tratar de llevar un nivel de vida empleando estúpidamente recursos económicos escasos, se tomó bajo argumentos de “solidaridad social” o para “evitar que el país se incendie”. De buenas intenciones está pavimentado el camino al infierno.
Tampoco importa si la sociedad es o se cree rica o pobre, igualmente sufrirá las consecuencias de sus decisiones económicas pobres basadas en argumentos necios, es decir sin sabiduría, inteligencia ni comprensión de la realidad y además, sin ponderar realmente las consecuencias futuras de las mismas.
Mucho menos importa, aunque muchos no lo crean, que se confiese una ideología de derecha o de izquierda, ni siquiera de centro. Esto parecen no entenderlo la gran mayoría de los líderes sobre los cuales recae la responsabilidad de tomar o influir las decisiones sobre el uso de recursos escasos sin base ni racionalidad económica.
Los de la izquierda, o los llamados del socialismo del siglo XXI, creen que este es un pensamiento falso, o como me dijo en el año 2000 un alto funcionario del gobierno del presidente Hugo Chávez, es un “constructo” (sic) de la ideología capitalista. Porque en su opinión la escasez sólo existe en la mente de los que “inventaron” las leyes de la economía. Supongo que con lo de “constructo” se refería a una invención. Por eso las decisiones en materia económica de los gobiernos de izquierda dan mayor importancia dizque a lo “social” y desdeñan las consecuencias propiamente económicas, que poco les importan.
Por otra parte, los de la derecha, donde quiera que se encuentren, se creen inmunes a la acción de las leyes de la economía sólo por el hecho de que en sus discursos, con los que apoyan sus malas políticas, se llenan la boca con las palabras dizque a favor del libre mercado y la competencia. Pero sus acciones y decisiones no toman en cuenta para nada las consecuencias que para una sociedad libre tiene tratar de “pasarle por encima” a las leyes más elementales de la economía. Desgraciadamente, cometen el mismo error que los de la izquierda.
De hecho, y tal como está sucediendo en los Estados Unidos, aquí en El Salvador y en muchos otros pueblos del mundo, nada hay más letal para el futuro de la libertad que las consecuencias de las malas decisiones económicas del pasado, junto con las muy malas medidas que se aplican en el presente.
Las consecuencias son que las sociedades terminan volcando su desilusión y amargura por los resultados de sus decisiones económicas erradas, en las promesas fútiles del intervencionismo económico y social, de la socialización y la estatización. Y lo más escalofriante: que las medidas de socialización y mayor intervención de la economía, las terminan tomando precisamente aquellos que dicen ser los paladines de la libertad.
Como siempre, aparecerán los iluminados que explican las crisis actuales con argumentos falaces que evitan o niegan en esencia que atropellar las leyes de la economía tiene consecuencias. Una de las cuales es que lo que hoy se gasta sin control en actividades de poca o ninguna producción real y sólo en el consumo, repercute en las posibilidades de crecimiento futuro. Porque los recursos económicos disipados en el presente no tienen ningún efecto positivo sobre la expansión de las posibilidades futuras de la sociedad, sino por el contrario el de condenarla aun más a las pesadas cadenas de la pobreza y ausencia de libertades.
Este es el precio que pagaremos por incurrir neciamente en el error de obviar las leyes fundamentales de la economía. Como diría el adagio de origen inglés: “no puedes comerte tu pastel y seguir teniéndolo” (can’t eat one’s cake and have it too).
Ricardo J. Flores, nuestro invitado especial tiene un MA en International Development Policy de Duke University y actualmente reside en El Salvador. Pueden leer este articulo en su blog.
Yo sé poquisimo de economía. Pero estoy de acuerdo en lo arriba escrito. El problema de nuestros paises "en vias de desarrollo" es ser demasiados pretensiosos. Es como el muchacho que empieza a trabajar en la empresa y ya quiere ganar tanto como el gerente.
ResponderEliminarPrueba de nuestra creciente estupidez en el sentido de administración economica es el recien concluido "Latin American Idol" ¿Saben que gano una panameña? Sí, saben cuanto gastaron los panameños en mensajes de texto para que esa panameña ganara? 2,675,000 por si queda dudas lo escribo ¡Dos millones! en solo 2 días. Luego nos quejamos que la salud, que las vias, que la comida. Paradoja. ¿Estupidez?
Es un circulo vicioso que no acaba pues ni la izquierda, ni la derecha tienen una solución. Quizas mal congenito, quizas, pero yo que sé de economía :)
Padre, muy bueno leer tu artículo y recordar la lección más improtante que toda persona y especialemnte todo estadista ( o mejor dichoestatista) debe recordar:
ResponderEliminar"El arte de la Economía consiste en considerar los efectos más remotos de cualquier acto o política y no meramente sus consecuencias inmediatas; en calcular las repercusiones de tal política no sobre un grupo, sino sobre todos los sectores" ( Henry Hazlitt)
El libro completo, que recomiendo altamente, lo pueden encontrar en www.hacer.org/pdf/Hazlitt01.pdf.
Con respecto al comentario de Ariel, me remito a decir que esos mensajes de textos fueron enviados sin coercion o amenaza de violencia alguna. Fueron enviados por personas que por x o y razon prefirieron un orgullo nacional que a donar o contribuir a al aguna caridad. En cambio nuestros gobeirnos siguen ignorando y malgastando los dineros públicos, una y otra vez siguen endeudandose y comprando a la opinion publica.
La derecha si tiene la solucion, solucion que ningun pais esta aplicando, se llama libre mercado ( o capitalismo si asi prefieren decirle), este sistema nace de la naturaleza misma del hombre y nada ni nadie los dirigen. En nuestros paises desde hace mas de medio siglo solo hay variaciones de la izqueirda, socialcristianismo, socialdemocratas, socialistas, comunistas, ambientalistas y demas istas. Todos poniendo al individuo como mera pieza de un plan o de algun rompecabeza benevolo.
Ricardo D.
Capitalismo la solución? Respeto tu opinión, quizas has de saber mucho más que yo con respecto al tema, pero toma esto como una sincera duda. ¿si es el capitalismo la solución, porque se esta precipitando a la peor crisis mundial en mucho tiempo? O estamos hablando del capitalismo ideologico?
ResponderEliminarGracias por tu comentario.
ResponderEliminarAclaro rapidamente esta confusion que es tan comun hoy en dia. Se piensa que esta crisis actual y que otras crisis tales como la Gran Depresion son el resultado del libre mercado, pero resulta ser que son todo lo ocntario, son el resultado de la intervension inescrupulosa del Gobierno en asuntos que no le competen.
La crisis hipotecaria originada en Estados Unido y que esta teniendo su estragos en todo el mundo son el resultado de que el gobierno estadounidense a traves del Federal Reserve hace varios anios bajo las tasas de interes para la obtencion de prestamos hipotecarios (entre otros).
En 4 pasos esto fue lo que sucedió:
La reserva Federal rebajo las tasas de interes a menos de 1%
Por lo tanto las tasas hipotecarias cayeron a su porcentaje mas bajo.
las bajas tasas causaron que los prestamos y la cantidad de solicitudes de los mismos explotaran, particularmente en lo q respecta en el ambito de bienes raices. (por ejemplo, los bancos comerciales casi triplicaron al cantidad de prestamos realizados)
Y por ultimo, todos estos prestamos con bajo interes tuvieorn que ser extendidos a las personas cuyo historial creditico era malo o casi inexistente, haciendo que incrementara la demanda por mas casas y otros bienes raices. AL incrementar la demanda aumento a precios astronomicos el precio de la oferta ( lo de la escazes). Esto a su vez causo que mas y mas casas fueran construidas.
Fannie Mae, Freddie Mac y lso demas bancos hipotecarios no fueron mas que el canal que permitio que estos malso prestamos e inversiones parecieran menos riesgosas. De esta manera la Reserva Federal peude burlarse nada mas q temporalmente del mercado. Al final es la oferta y la demanda, el mercado, el que toam el control.
(la mayoria de al explicacion anterior fue tomada del profesor Mark Thorton)
Cualquier cosa esoty mas que dispuesto a explicarlo y seguir comentando y discutiendo este tema.
saludos y muchas bendiciones
RDF
Me parece muy interesante. Creo que hay una desinformación de ambas partes (izquierda y derecha) (capitalismo y socialismo) Lo de los prestamos lo había escuchado, sin embargo no lo había interpretado como una carencia de las metidas de mano (pie) del gobierno. El paternalismo (estamos de acuerdo) no funciona demasiado bien. La pregunta quizas sería: ¿Como hacemos para cambiar eso?
ResponderEliminarP.D.
Me gustaría que me recomendaras algun libro sobre economía que sea sencillo o por lo menos entendible para un neofito como yo, lo agradecería mucho.
Ariel, con mucho gusto.
ResponderEliminarHay 3 libros que te puedo recomendar, que son muy simples y directos al grano.
El primero es del cual cite en mi primera intervencion, "La Economia en una Leccion" de Henry Hazlitt
lo peudes encontrar compeltamente en linea aca: www.hacer.org/pdf/Hazlitt01.pdf.
Otro se llama "Economia para la gente" de Gene Callahan, lo puedes encontrar talvez en una libreria o en internet
Y por ultimo está : "Diez lecciones de Economía" de Faustino Ballvé
Todos lso peudes encontrar en ingles en la página www.mises.org
Con respecto a que hacer, solo queda estudiar la palabra, ver lo que el Eterno quiere para nuestras naciones y nuestras vidas. La verdad y la vida es para todos los ámbitos. Queda tambien difundir esta verdad y seguir estudiando todos los ámbitos del conocimiento humano. No veremos la libertad en nuestro tiempo pero de seguro podremos ayudar en algo.
Saludos y bendiciones del Eterno
Hola a ariel y a burocracia:
ResponderEliminarComo autor del artículo que dio pie a su contrapunteo de comentarios, les comento que hice el planteamiento en términos maniqueos de izquierda y derecha para que tratar de hacer su lectura más atractiva y comprensible.
Sin embargo, creo que la cuestión debería plantearse más bien en términos de un continuo con diferentes matices entre el "estatismo-intervencionismo" y el "liberalismo" (que no es lo mismo que neo-liberalismo).
Porque, aunque alguna gente por estos lares de El Salvador les duela, la derecha que está gobernando, se puede ubicar tranquilamente en el lado del espectro que ocupa el "estatismo-intervencionista" y el cual comparte con gobiernos de izquierda que pululan también en nuestra querida América Latina.
Saludos a ambos,